Innovación. La palabra mágica, el comodín de cualquier discurso, la respuesta a las incógnitas e incertidumbres que nos asaltan en la gestión empresarial. Lo cierto es que su importancia es capital. La innovación, tecnológica y social, no es un capicho o una política puntual de una administración, es una necesidad que nos afecta a todos.
Está claro que hay que innovar. ¿Cómo? Innovando en producto, innovando en proceso, innovando en marketing, innovando en capacidad operativa. La innovación, por sí sola, no garantiza necesariamente, que se alcance la competitividad, pero es un peaje imprescindible si se quieren tener opciones en un mercado global, inestable y ferozmente competitivo. Esto quiere decir que las empresas deben intentar transformar lo que, a primera vista, supone una amenaza, en una oportunidad.
Se deben establecer metodologías y estrategias definidas para poder estar en primera línea. Ahora no basta con hacer las cosas bien. Si no innovas, no eres competitivo. El mismo mercado que ha permitido ampliar tus líneas de negocio o te ha proporcionado nuevos proveedores, tarde o temprano, te acabará pasando factura, surgirán otros proveedores y te dejará a un lado. Desde SPRI, como secretaría técnica de la iniciativa del Gobierno Vasco Euskadi+Innova -un perfecto ejemplo de operatividad y coordinación entre todos los agentes implicados en la promoción del país, se trabaja para evitar que eso ocurra.
Euskadi+Innova nace con el objetivo de poner la innovación en la primera página de las agendas de los empresarios vascos. La innovación cono algo natural en la organización. Ofrece herramientas, soportes y asesoramiento para estar en el primer vagón del desarrollo y la innovación. Proporciona un camino, la Red Innovanet y una Agenda de la Innovación, que busca la implicaciónactiva de trabajadores y directivos, establece directrices y experiencias de buenas prácticas para avanzar hacia la innovación sistemática.
La Red Innovanet se está presentando pueblo a pueblo, comarca a comarca, en Foros de encuentro en los que las instituciones ponen en manos de las pymes toda una batería de ayudas para la innovación en sus organizaciones. Los resultados están siendo excelentes, con docenas de empresas que ya han comenzado a implantar sus agendas de innovación para ser las mejores en competitividad, innovación, creatividad y compromiso. Han pasado los tiempos en que una empresa se posicionaba de manera duradera como líder en el mercado. En la actualidad, una organización debe superarse día a día, intentando mejorar su cartera de productos y encontrar una adecuada receptividad en el mercado. Decía Machiavello que “nada más difícil de emprender ni más peligroso de conducir que tomar la iniciativa en la introducción de un nuevo orden de cosas”. Por eso, ser competitivos exige valentía. Determinación. Saber que hay que ir más allá, aún cuando nuestra organización o empresa esté consolidada y con buenas cuentas de resultados. Es precisamente cuando las cosas van bien, cuando hay que parar, mirar alrededor, analizar e innovar.

MAURO LAZKANO
Director General de SPRIInnovación. La palabra mágica, el comodín de cualquier discurso, la respuesta a las incógnitas e incertidumbres que nos asaltan en la gestión empresarial. Lo cierto es que su importancia es capital. La innovación, tecnológica y social, no es un capicho o una política puntual de una administración, es una necesidad que nos afecta a todos.
Está claro que hay que innovar. ¿Cómo? Innovando en producto, innovando en proceso, innovando en marketing, innovando en capacidad operativa. La innovación, por sí sola, no garantiza necesariamente, que se alcance la competitividad, pero es un peaje imprescindible si se quieren tener opciones en un mercado global, inestable y ferozmente competitivo. Esto quiere decir que las empresas deben intentar transformar lo que, a primera vista, supone una amenaza, en una oportunidad.
Se deben establecer metodologías y estrategias definidas para poder estar en primera línea. Ahora no basta con hacer las cosas bien. Si no innovas, no eres competitivo. El mismo mercado que ha permitido ampliar tus líneas de negocio o te ha proporcionado nuevos proveedores, tarde o temprano, te acabará pasando factura, surgirán otros proveedores y te dejará a un lado. Desde SPRI, como secretaría técnica de la iniciativa del Gobierno Vasco Euskadi+Innova -un perfecto ejemplo de operatividad y coordinación entre todos los agentes implicados en la promoción del país, se trabaja para evitar que eso ocurra.
Euskadi+Innova nace con el objetivo de poner la innovación en la primera página de las agendas de los empresarios vascos. La innovación cono algo natural en la organización. Ofrece herramientas, soportes y asesoramiento para estar en el primer vagón del desarrollo y la innovación. Proporciona un camino, la Red Innovanet y una Agenda de la Innovación, que busca la implicaciónactiva de trabajadores y directivos, establece directrices y experiencias de buenas prácticas para avanzar hacia la innovación sistemática.
La Red Innovanet se está presentando pueblo a pueblo, comarca a comarca, en Foros de encuentro en los que las instituciones ponen en manos de las pymes toda una batería de ayudas para la innovación en sus organizaciones. Los resultados están siendo excelentes, con docenas de empresas que ya han comenzado a implantar sus agendas de innovación para ser las mejores en competitividad, innovación, creatividad y compromiso. Han pasado los tiempos en que una empresa se posicionaba de manera duradera como líder en el mercado. En la actualidad, una organización debe superarse día a día, intentando mejorar su cartera de productos y encontrar una adecuada receptividad en el mercado. Decía Machiavello que “nada más difícil de emprender ni más peligroso de conducir que tomar la iniciativa en la introducción de un nuevo orden de cosas”. Por eso, ser competitivos exige valentía. Determinación. Saber que hay que ir más allá, aún cuando nuestra organización o empresa esté consolidada y con buenas cuentas de resultados. Es precisamente cuando las cosas van bien, cuando hay que parar, mirar alrededor, analizar e innovar.

MAURO LAZKANO
Director General de SPRI