“En el día a día de nuestros negocios, hemos podido comprobar que en torno a un 40% de facturas impagadas no se llegan a reclamar nunca y ello es un problema grave para cualquier negocio”, explica Guillermo Sarabia, director de la iniciativa “ReclamaTuMismo”, una plataforma creada por profesionales vinculados al ámbito judicial y de gestión empresarial; abogados, procuradores de los tribunales y asesores de empresas y, también profesionales del marketing y la comunicación.

Efectivamente, se trata de una problemática que pone en serios riesgos la actividad de toda empresa…

Hicimos un análisis de los factores que podían influir en que, aproximadamente, un 40% de facturas impagadas no se llegaran a reclamar nunca y pudimos comprobar como los costes del proceso, la falta de tiempo o pereza, las dificultades burocráticas o el desconocimiento eran factores que incidían negativamente en las empresas a la hora de reclamar sus impagos de facturas.

Así, consideramos que gracias a la colaboración entre tecnología (internet, automatización, asistentes virtuales, firma digital electrónica…) y personas (abogados, procuradores, desarrolladores de software,…), era posible dar una solución a todos estos problemas de una manera sencilla, flexible, profesional y económica.

 

Buscáis eliminar las barreras jurídicas que en muchas ocasiones deben afrontar las personas y negocios en sus reclamaciones por impagos de facturas,..

Como decíamos en el punto anterior, hay una serie de factores que pueden incidir negativamente a las empresas a no reclamar sus impagos de facturas. Entre ellos destacaríamos:

1. Costes del proceso Vs Rentabilidad

Frecuentemente nos encontramos con clientes que te llegan a decir que no reclaman porque los costes (abogados, procuradores, asesoría…) casi son mayores que el importe a reclamar y que para lo que puede obtener no le merece la pena.

Es evidente que los costes inciden directamente en la rentabilidad del procedimiento y en facturas de importes pequeños, pues la reclamación no es rentable para nadie…

2. La falta de tiempo o pereza

Realizar una reclamación, ya sea por uno mismo o por un tercero, implica diferentes trámites, mandar documentación, quedar con el abogado o el asesor, cuadrar las agendas entre unos y otros, etc. En un mundo en el que cada vez falta más tiempo, nos dimos cuenta que las empresas tienden a ‘procrastinar’, de ahí que fuera algo imprescindible desarrollar una plataforma flexible y sencilla para reclamar los impagos.

3. El desconocimiento

Por otro lado, a lo largo de nuestros años en el mundo judicial, nos sorprendía mucho que a pesar de que la ley permite ir sin abogado y procurador en aquellos procedimientos en los que la cuantía reclamada fuera inferior a 2.000 € (parece como si la ley tuviera en cuenta lo de la rentabilidad del asunto), en la práctica apenas nadie conoce esta circunstancia.

4. Las dificultades burocráticas

A pesar de que uno mismo pueda reclamar impagos de menos de 2.000 €, en la práctica no se hace bien por el desconocimiento, pero principal y fundamentalmente por las dificultades burocráticas. Un proceso judicial siempre es complejo; requiere de numerosos trámites y lo cierto es que el propio juzgado no lo pone nada fácil, de ahí que nadie quiera o nadie se atreva a intervenir por su cuenta.

Así es; muchas dificultades y, precisamente por ello, “ReclamaTuMismo” tiene su razón de ser.

Bajo este contexto surge nuestro proyecto y nuestra plataforma, con el reto de conseguir rebajar ese porcentaje tan alto de empresas que no reclaman sus impagos de facturas.

Para conseguir ese reto, la plataforma se ha desarrollado teniendo en cuenta todos esos factores, de tal manera que el cliente puede iniciar fácilmente una reclamación, firmarla digitalmente y desde su ‘área cliente’ realizar un seguimiento del estado se procedimiento a tiempo real. También, la propia plataforma realiza un seguimiento personalizado y automatizado con cada cambio que se produzca a lo largo del proceso de reclamación.

Nuestro objetivo es facilitar a las empresas la reclamación de sus impagados y a también potenciar las reclamaciones, lo que nosotros llamamos vulgarmente, “que saquen las facturas del cajón”, pues se pueden reclamar facturas de hasta 5 años atrás.

Además, vuestro método online tiene ciertas ventajas frente a sistemas de reclamación más convencionales

Nuestra plataforma puede presentar ciertas ventajas, por ejemplo el precio, ya que al automatizar ciertas partes del proceso y realizar tú mismo el seguimiento del proceso, se abaratan ciertos costes que, a su vez, repercuten en un precio más económico para todas aquellas empresas que quieran reclamar.

Por otro lado, las empresas necesitan optimizar el tiempo, así que vimos importante que la plataforma permitiera en menos de 5 minutos presentar una reclamación; en cualquier lugar, desde cualquier dispositivo y a cualquier hora del día, bien sea en la oficina como en el autobús, esperando en el médico o en el sofá de tu casa.

 

Y ‘al otro lado de la pantalla’ hay un soporte facilitando las cosas…

En efecto, hay un equipo de profesionales (abogados y procuradores) detrás haciendo que todo funcione correctamente. También disponemos de asistencia online, por lo que la seguridad y profesionalidad del servicio está más que garantizada.

Asimismo, posibilitamos la inscripción de los deudores insolventes en un fichero de morosos, algo que por regla general no se viene haciendo pero, que puede ser una importante garantía de cobro.

El uso de tecnología, a su vez, permite realizar un seguimiento del proceso a tiempo real difícil de realizar por ti mismo. Desde el ‘área cliente’, puedes comprobar el estado del proceso en cualquier momento, el histórico de todos los cambios que se han producido y, paralelamente, recibes un seguimiento personalizado vía mail con cada cambio que se produzca. Todo esto permite otorgar al cliente un mayor valor que sin el uso de tecnología sería difícil conseguir.

Sin duda, un sistema innovador que se resume en seis pasos:

Correcto. El proceso completo lo hemos resumido en 6 pasos y realmente es así de sencillo…  Inicias la reclamación, se presenta la demanda y una vez sea admitida el moroso puede contestar oponiéndose o no.

El juzgado podrá resolver sin más o algo más improbable: convocar a las partes a una vista. Desde la plataforma podrás solicitar el acompañamiento a vista para que uno de nuestros profesionales te acompañe si lo deseas y, finalmente, en cualquiera de los casos el juzgado resolverá.

Sólo quedará que el deudor pague y si no lo hace, desde la propia plataforma podrás solicitar el embargo a tu deudor.

Si has embargado a tu deudor y el juzgado notifica que es insolvente, desde la plataforma te damos la opción de incorporar a tu deudor a un fichero de morosos.

Como puede observarse, en cada caso pueden darse diferentes variantes, pero todas han sido, previstas y analizadas por el equipo legal para poder dar un servicio íntegro y completo.

Desafortunadamente, en situaciones de crisis como la derivada por la pandemia, probablemente aumente el número de reclamaciones por impagos…

Estamos comprobando cómo la crisis del COVID-19 está sirviendo de excusas para dejar de pagar en general, ya no sólo facturas, también alquileres, préstamos… Pero a su vez, el COVID-19 ha cambiado la mentalidad de muchas personas en lo que al uso de tecnologías se refiere; es indudable que el uso de plataformas online y del comercio online ha crecido mucho.

Habláis sobre “revolucionar el mundo jurídico” a través de las nuevas herramientas tecnológicas, pero ¿en qué medida ha evolucionado este sector ‘del papel a lo digital’?

El sector judicial requiere de una profunda digitalización y modernización, que pasa en primera medida por cambiar de mentalidad. Se han hecho cosas, pero da la sensación de que siempre se va tarde y de una forma muy lenta… La tecnológica avanza muy rápido y la sociedad también se adapta de una manera más o menos rápida, pero el sector judicial no lo ha hecho y ello repercute negativamente en la sociedad.

En este contexto, nosotros asumimos nuestro compromiso de innovar dentro de nuestro sector, principalmente para solucionar un problema real que habíamos detectado pero, también para trasladar más valor y para facilitar el acceso a la justicia. La realidad es que ningún sector se queda fuera de la innovación y o evolución.

Finalizamos ya, ¿cuáles son vuestros próximos retos?

Nuestro reto principal es que la plataforma se use de una manera masiva y generalizada por las empresas, conseguir que tengan ese hábito de reclamar y que confíen en la plataforma.

Otro de los retos es conseguir que esos clientes que reclamen por primera vez vuelvan a confiar en nosotros y, en su caso, vuelvan a reclamar con nosotros.

Desde un punto de vista más comercial, nuestro reto es abarcar todo el territorio a nivel estatal.

Y por ultimo, otro reto interno es que cuando esté consolidada la reclamación de facturas impagadas, podamos ofrecer nuevos servicios en los que ya estamos trabajando.

+info: www.reclamatumismo.com